Las autoridades de gobierno han confirmado que el Liceo Bicentenario de Excelencia de Trehuaco contaba con antecedentes sobre la condición del estudiante de 14 años que agredió a una profesora de primero medio, quien permanece internada en estado grave en Concepción. En respuesta a este incidente, se ha oficiado a la Superintendencia de Educación para analizar la situación y determinar las acciones a seguir.
El delegado presidencial de Ñuble, Rodrigo García, junto con el seremi de Educación, César Riquelme, se trasladaron hasta la comuna para reunirse con el alcalde, el director del establecimiento y docentes, con el objetivo de abordar la crisis que ha generado este caso dentro de la comunidad educativa. «Hemos querido venir a Trehuaco a dar nuestro apoyo a la comunidad educativa. Es un hecho de extrema gravedad que afecta a toda la comunidad, profesores, alumnos, pero también debemos ver cómo se enfrentará esto a futuro»
, señaló García.
Medidas para Abordar la Situación
Las autoridades han sugerido realizar una jornada de reflexión en el liceo para evaluar qué medidas concretas se deben tomar, ya que son ellos quienes mejor conocen las condiciones existentes y cómo pueden superar esta situación. Además, se ha indicado que la Oficina Local de la Niñez brindará apoyo al estudiante, ya que requiere atención especial.
Por su parte, el seremi de Educación, César Riquelme, confirmó que el estudiante tenía un diagnóstico de Trastorno del Espectro Autista (TEA) desde su educación básica, y que el establecimiento contaba con la documentación correspondiente. «El estudiante proviene de una escuela de la misma comuna con un diagnóstico TEA acreditado. Si el ataque ocurrió por una desregulación o por un problema de convivencia, es materia de investigación»
, explicó Riquelme.
Responsabilidad y Medidas Disciplinarias
Riquelme aclaró que la condición TEA de un estudiante no lo exime de responsabilidad en temas de convivencia escolar, y que cuando ocurren situaciones de este tipo, es fundamental determinar si se trata de una desregulación emocional o de un problema conductual. En este sentido, el Liceo Bicentenario tiene un plazo de tres días para elaborar un informe interno sobre el caso y definir las medidas disciplinarias que estime convenientes.
Desde la Seremi de Educación, también se indicó que ya se ha oficiado a la Superintendencia de Educación para analizar la documentación del estudiante y que la institución deberá evaluar si el alumno continuará en el establecimiento o si se buscarán alternativas educacionales. «La seguridad dentro de la comunidad escolar es prioritaria. Se debe garantizar tanto el derecho al estudio del menor como la protección de docentes, asistentes y estudiantes. La investigación determinará qué medidas se tomarán»
, concluyó Riquelme.
Mientras tanto, la comunidad educativa sigue conmocionada por la agresión y se esperan nuevas determinaciones por parte del liceo y de las autoridades en los próximos días, con el objetivo de garantizar la seguridad y el bienestar de todos los miembros de la comunidad escolar.