Los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) de Chile revelan una interesante dinámica en la natalidad del país. Por un lado, se observa un descenso sostenido en los niveles de fecundidad, mientras que, por otro, se registra un aumento significativo en el número de nacimientos de madres extranjeras.
Caída de la Tasa Global de Fecundidad
Según el informe del INE, en 2022 se registraron un total de 189.303 nacimientos a nivel nacional, lo que representa un «efecto rebote» tras las reducciones observadas en 2020 (-7,2%) y 2021 (-9,1%) debido a la pandemia de COVID-19. Sin embargo, la Tasa Global de Fecundidad (TGF) se situó en 1,25 hijos por mujer, y en 2023 habría alcanzado 1,16, muy por debajo del nivel teórico de reemplazo de 2,1 hijos.
Aumento de Nacimientos de Madres Extranjeras
En contraste con la tendencia nacional, el número de nacimientos de madres extranjeras en Chile ha continuado incrementándose. Mientras que en 2017 el 6,9% de los nacidos vivos provenía de una mujer de origen extranjero, en 2022 esta proporción subió a 18,9%.
De los 35.864 nacidos vivos de madres extranjeras en 2022, el mayor porcentaje correspondió a mujeres venezolanas (20,3%), seguidas de las madres peruanas (10,6%), haitianas (10,0%), bolivianas (8,1%) y colombianas (6,2%). Estas cinco nacionalidades concentran el 55,3% del total.
Variaciones Regionales
En el desglose por regiones, los porcentajes más altos de hijos de madres extranjeras se registraron en Tarapacá (47,9%), Antofagasta (40,6%), Arica y Parinacota (38,1%), Metropolitana (26,3%) y Atacama (20,1%). Por el contrario, las regiones de Los Ríos (3,0%), La Araucanía (3,9%) y Ñuble (5,7%) presentaron los menores porcentajes de nacidos vivos de madres extranjeras.
Estos datos reflejan una transformación demográfica en Chile, con un descenso de la fecundidad nacional y un aumento significativo de la población de origen inmigrante, lo que plantea desafíos y oportunidades en términos de políticas públicas, integración social y desarrollo económico.
