En medio de un panorama económico y geopolítico cada vez más incierto, el precio del oro ha logrado alcanzar un nuevo máximo histórico, situándose cerca de los 3.000 dólares la onza. Este fenómeno refleja la creciente demanda del metal precioso como un activo refugio en tiempos de turbulencia.
Según los expertos, el alza en el precio del oro se debe a varios factores clave. Por un lado, las tensiones comerciales entre Estados Unidos y Europa, con la amenaza de Trump de imponer un arancel del 200% a los vinos y champanes europeos, han generado una caída en los mercados bursátiles y un aumento de la incertidumbre económica. En este contexto, los inversores han recurrido al oro como un escudo contra la inflación y la devaluación de las monedas.
Geopolítica y Volatilidad Impulsan la Demanda del Oro
Además de la tensión comercial, la ausencia de diálogo entre Rusia y Estados Unidos también ha contribuido al alza del precio del oro. Según el gerente de estudios de XTB Latam, Diego Mora, la falta de comunicación entre estas dos potencias mundiales aumenta la incertidumbre geopolítica, lo que a su vez eleva la búsqueda de activos seguros como el oro.
En este sentido, el oro se ha consolidado como un refugio para los inversores ante posibles escaladas de tensiones políticas y económicas. Tal como lo explica el economista y fundador de Fortuna SFP, José Manuel Marín Cebrián, «en momentos de incertidumbre económica, el valor del oro tiende a aumentar, sirviendo como un escudo contra la inflación y la devaluación de las monedas».
La Casa de Moneda se Suma a la Tendencia
La creciente demanda del oro ha llevado incluso a la Casa de Moneda a anunciar la venta de «mini lingotes» de 24 quilates en su página web, brindando a los inversores una nueva opción para adquirir este activo refugio.
En resumen, el precio del oro ha alcanzado un nuevo máximo histórico debido a la incertidumbre económica y geopolítica que prevalece en el panorama actual. Los inversores han recurrido al metal precioso como un activo seguro para proteger sus carteras, lo que ha impulsado aún más la demanda y el valor del oro.
