Hoy lamentamos la pérdida de Simon Fisher-Becker, un actor británico cuya interpretación del Fraile Gordo en la saga de Harry Potter lo convirtió en un querido miembro del elenco de fantasmas de Hogwarts. Falleció a los 63 años, dejando un legado imborrable en la industria del entretenimiento.
Fisher-Becker, cuyo esposo Tony confirmó su fallecimiento a través de un emotivo mensaje en Facebook, tuvo una carrera que abarcó más de tres décadas. Además de su memorable papel en la primera película de Harry Potter, también se destacó por su interpretación de Dorium Maldovar en la icónica serie de ciencia ficción Doctor Who, donde participó en tres episodios y dejó su huella en los audiodramas derivados.
Más Allá de Hogwarts y el TARDIS
Si bien el Fraile Gordo y Dorium Maldovar fueron sus papeles más reconocidos, la trayectoria de Fisher-Becker abarcó mucho más. Debutó en la pantalla grande con un pequeño papel en Arrivederci Millwall (1990) y continuó su carrera en televisión con producciones como An Ungentlemanly Act (1992), Los Miserables (2012), Waterside y Puppy Love.
Su versatilidad como actor le permitió destacar en diversos géneros, desde el drama hasta la comedia. Según su representante, Kim Barry, Simon era un cliente y un amigo cercano con quien compartió 15 años de amistad
, y siempre se caracterizó por su amabilidad, generosidad y atención con todos.
El Legado del Fraile Gordo
La noticia de su fallecimiento ha conmocionado a sus fans y colegas en la industria. La productora Big Finish Productions, encargada de los audiodramas de Doctor Who, expresó su profundo pesar por la partida del actor. Asimismo, sus seguidores han inundado las redes sociales con emotivos mensajes de despedida y recuerdos de sus memorables interpretaciones.
Aunque Simon Fisher-Becker ya no esté entre nosotros, su legado como el querido Fraile Gordo y Dorium Maldovar perdurará en el corazón de los fanáticos de Harry Potter y Doctor Who. Su talento y carisma serán recordados por generaciones, y su nombre se unirá a la lista de actores que han dejado una huella imborrable en la industria del entretenimiento.
