El expresidente de Perú, Pedro Castillo, ha anunciado que se declara en huelga de hambre como señal de protesta por el «politizado juicio oral» en su contra. Castillo enfrenta cargos por presuntos delitos de rebelión y abuso de autoridad tras intentar arrogarse más competencias en diciembre de 2022, hechos por los que fue destituido y detenido.
En una escueta misiva compartida en sus redes sociales, el exmandatario reitera que está siendo juzgado por unos hechos que «nunca» cometió y recuerda que la jueza al frente del caso ya «ha adelantado opinión» en su contra para «forzar el tipo penal de rebelión». Pongo en conocimiento a mi familia, al pueblo peruano, que haciendo uso de mi derecho humano, he decidido acatar a partir de la fecha a una huelga de hambre; acto que me llevan a tomar por las injusticias que se viene cometiendo conmigo
, expresa Castillo en el documento firmado por su abogado, el exministro de Defensa Walter Ayala.
Contexto del Juicio y Protestas
Castillo se encuentra inmerso en este proceso judicial por los hechos acontecidos en diciembre de 2022, cuando trató sin éxito de disolver el Congreso, convocar elecciones y crear un gobierno de excepción para intentar sacar adelante las reformas prometidas durante la campaña electoral previa. La Fiscalía de Perú ha pedido para el exjefe de Estado una pena de 34 años de prisión, así como una inhabilitación de tres años y medio y el pago de casi 65.600 soles peruanos (aproximadamente 17.100 euros) en concepto de reparación civil.
La detención de Castillo trajo para Perú una de sus peores crisis recientes, con casi medio centenar de muertos por la represión de las fuerzas de seguridad en las protestas por su arresto y en contra de quien tomó el mando, la que hasta entonces era su vicepresidenta, Dina Boluarte.
Perspectiva del Exmandatario
Desde la perspectiva de Castillo, el proceso judicial en su contra es un «juicio politizado» en el que la jueza ha «adelantado opinión» en su contra. El exmandatario considera que está siendo juzgado por hechos que «nunca» cometió, lo que lo ha llevado a tomar la drástica medida de iniciar una huelga de hambre para denunciar lo que considera una «injusticia».
Esta acción del expresidente peruano busca llamar la atención sobre su caso y generar presión para que se revise el proceso judicial en su contra. Sin embargo, las autoridades judiciales han reiterado que el juicio se está llevando a cabo de acuerdo con la ley y que Castillo tendrá la oportunidad de presentar su defensa.
Conclusión: Un Caso Complejo y Polarizante
El caso de Pedro Castillo se ha convertido en un tema altamente polarizante en Perú, con sus seguidores defendiendo su inocencia y sus detractores respaldando el proceso judicial en su contra. La huelga de hambre del exmandatario es un último recurso para intentar revertir lo que él considera un «juicio politizado», pero las autoridades han dejado claro que el proceso seguirá su curso legal.
Este caso refleja la profunda crisis política y social que atraviesa Perú, con la población dividida y enfrentada en torno a la figura de Castillo y las acciones de su gobierno. La resolución de este conflicto requerirá de un diálogo y entendimiento entre todas las partes involucradas, con el objetivo de encontrar una solución justa y pacífica.
