Chile ha dado un importante paso en la lucha contra el crimen transnacional al adherirse al Convenio Europeo de Extradición. Este mecanismo jurídico, utilizado por los miembros del Consejo de Europa, regula el proceso de extradición entre los países firmantes, facilitando la captura y entrega de fugitivos de la justicia.
Hasta ahora, Chile solo contaba con acuerdos bilaterales de extradición con un puñado de países, como Reino Unido, Bélgica, España, Corea e Italia. Con su incorporación al Convenio Europeo, Chile amplía su red de cooperación a 51 Estados, incluyendo a todos los miembros del Consejo de Europa, así como a Sudáfrica, Corea del Sur, Israel y Rusia.
Ventajas del Convenio Europeo de Extradición
La principal ventaja de este instrumento es que obliga a los Estados parte a entregar a los criminales solicitados, salvo en casos previamente establecidos donde se puede rechazar el requerimiento. Esto representa un avance significativo en comparación a la situación previa, donde las solicitudes de extradición a países como Francia, Alemania o Malta quedaban sujetas por completo al derecho local de cada Estado, dificultando aún más el proceso.
«En la actualidad, donde el fenómeno del crimen organizado transnacional se ha vuelto una realidad que azota a la gran mayoría de los Estados, es necesario que Chile tenga tratados con la mayor cantidad de países posibles, a fin de favorecer la existencia de reglas claras que permitan traer a los fugitivos de la justicia a enfrentar los tribunales nacionales»
, explicó la ministra (s) de Relaciones Exteriores, Gloria de la Fuente.
Mejorando la Cooperación Internacional
Según datos de Cancillería, entre 2013 y 2023 hubo 70 solicitudes de extradición transmitidas a Europa, de las cuales un 32,7% fueron dirigidas a Estados con los que no existía un tratado sobre la materia. En el mismo período, Chile recibió 110 solicitudes de extradición de países europeos, de las cuales el 50% provenían de Estados sin un convenio aplicable.
La adhesión al Convenio Europeo de Extradición simplifica y agiliza este proceso, estableciendo reglas claras y obligatorias para los países firmantes. Esto se traduce en mayores posibilidades de capturar y juzgar a delincuentes que huyen de la justicia nacional, fortaleciendo la lucha contra el crimen organizado transnacional.
Cabe destacar que, además de este nuevo acuerdo, Chile también ha suscrito recientemente convenios de extradición con Argentina y Brasil, ampliando aún más su red de cooperación internacional en esta materia.