Las autoridades penitenciarias de Bulnes se vieron obligadas a tomar medidas drásticas luego de que una mujer fuera detenida mientras intentaba ingresar una importante cantidad de drogas al Centro Penitenciario Femenino. El incidente ocurrió durante los controles de rutina a las visitas, cuando el personal de Gendarmería descubrió que la involucrada, identificada como S.C.C.G., llevaba consigo 127 dosis de sustancias ilícitas.
Según los detalles proporcionados, la revisión realizada por las funcionarias reveló la presencia de 69,6 gramos de cannabis y 55,4 gramos de pasta base de cocaína. Ante esta evidencia, se dio aviso inmediato al fiscal de turno, quien ordenó la detención de la mujer para que enfrentara el correspondiente control de detención.
El hallazgo de estas drogas evitó que circularan dentro del penal, lo que podría haber alterado gravemente el orden interno
, señalaron desde Gendarmería. La institución informó que reforzarán los controles en los accesos del recinto penitenciario con el objetivo de reducir el ingreso de sustancias ilícitas y mantener la seguridad de las internas.
Tráfico de Drogas, un Problema Persistente en las Cárceles
El intento de introducir drogas a las cárceles es un fenómeno que lamentablemente se ha vuelto recurrente en Chile. Según datos del Ministerio de Justicia, durante el año 2024 se registraron más de 500 incidentes de este tipo en los diferentes recintos penitenciarios del país.
Para hacer frente a esta problemática, las autoridades han implementado una serie de medidas de seguridad más estrictas, como la revisión exhaustiva de visitantes, el uso de tecnología de escaneo y la capacitación constante del personal de Gendarmería. Sin embargo, los traficantes continúan buscando formas cada vez más sofisticadas de burlar los controles.
El Impacto de las Drogas en la Vida de las Reclusas
La presencia de drogas en las cárceles no solo representa un riesgo para la seguridad, sino que también tiene un impacto negativo en la rehabilitación y reinserción social de las internas. El consumo de sustancias ilícitas dificulta enormemente el proceso de recuperación y reintegración de las mujeres privadas de libertad
, explica la psicóloga penitenciaria, Alejandra Soto.
Según Soto, el acceso a las drogas dentro de los recintos carcelarios puede llevar a las reclusas a caer en un círculo vicioso de adicción, lo que a su vez aumenta los problemas de salud mental, violencia y reincidencia delictiva. Por ello, es fundamental reforzar los esfuerzos para mantener un ambiente libre de drogas en las cárceles.
Desafíos Pendientes en la Seguridad Penitenciaria
Si bien los incidentes como el ocurrido en el Centro Penitenciario Femenino de Bulnes son un recordatorio de los desafíos que enfrentan las autoridades, también evidencian la necesidad de continuar fortaleciendo los sistemas de seguridad y los programas de rehabilitación en las cárceles.
Expertos en el tema coinciden en que se requiere una estrategia integral que combine el endurecimiento de los controles, la mejora de la infraestructura carcelaria y la implementación de iniciativas enfocadas en la reinserción social de las internas. Solo así se podrá lograr un verdadero impacto en la lucha contra el tráfico de drogas en las prisiones.
En este sentido, la detención de la mujer en Bulnes es un recordatorio de que queda mucho trabajo por hacer, pero también una oportunidad para que las autoridades redoblen sus esfuerzos y demuestren su compromiso con la seguridad y el bienestar de la población penitenciaria.