Benjamin Netanyahu, el primer ministro de Israel, ha advertido que no avanzará con el plan de alto al fuego en Gaza hasta que el movimiento islamista Hamás no entregue una lista concreta con los nombres de los rehenes israelíes que serán liberados como parte del acuerdo.
En una declaración publicada en su cuenta de la red social X, Netanyahu aseguró: No podremos avanzar con el acuerdo hasta que recibamos la lista de rehenes que serán liberados, como se acordó. Israel no tolerará violaciones del acuerdo. Hamás es el único responsable
.
Este requisito se produce después de que el Gobierno israelí aprobara el viernes el alto al fuego con Hamás, que implicaría el intercambio de 737 presos palestinos por 33 rehenes israelíes. Sin embargo, según medios locales, en el primer día de tregua solo serían liberadas tres mujeres, cuyo nombre aún desconoce el Gobierno israelí.
Tensiones persistentes en el conflicto
La exigencia de Netanyahu de recibir primero la lista de rehenes a liberar por parte de Hamás refleja las tensiones subyacentes que persisten en el conflicto entre Israel y los grupos palestinos. A pesar de los esfuerzos por alcanzar un acuerdo de alto al fuego, ambas partes mantienen desconfianza y buscan asegurar sus propios intereses antes de avanzar.
Analistas señalan que este requisito de Netanyahu podría ser una estrategia para presionar a Hamás y obtener más concesiones en el proceso de negociación. Al mismo tiempo, Hamás probablemente buscará mantener cierto margen de maniobra y no revelar todos los detalles de la liberación de rehenes hasta el último momento.
Papel de los mediadores internacionales
En este contexto, el papel de los mediadores internacionales, como Catar, será crucial para facilitar el diálogo y lograr que ambas partes cumplan con lo acordado. Será necesario que estos intermediarios logren que tanto Israel como Hamás cedan en algunos de sus puntos de vista para poder avanzar hacia una tregua duradera.
La resolución de este impasse en torno a la lista de rehenes será un test importante para determinar si el alto al fuego puede implementarse de manera efectiva y si las partes están realmente comprometidas con un proceso de paz a largo plazo.
