Las vacaciones son un momento de descanso y relajación, pero para las empresas, la ciberseguridad nunca puede estar fuera de servicio. Los ciberdelincuentes están siempre al acecho, y pueden aprovechar los periodos festivos para lanzar ataques cuando el personal de seguridad está ausente.
Amenazas Crecientes en Épocas de Vacaciones
Estudios revelan que los ataques de ransomware aumentan hasta un 30% durante los días festivos y fines de semana, ya que los ciberdelincuentes buscan aprovechar la falta de personal de seguridad. Además, el 89% de los profesionales de la seguridad están preocupados por esta eventualidad.
Algunos ejemplos destacados incluyen el ataque al oleoducto Colonial Pipeline en 2021, el ataque a JBS durante el Día de los Caídos, y el ataque a Kaseya durante el 4 de julio. Estos incidentes demuestran que los ciberdelincuentes no respetan los calendarios de vacaciones.
Más allá del Ransomware: Otras Amenazas Latentes
El ransomware no es la única amenaza a la que se enfrentan las empresas durante los recesos. Otros riesgos incluyen phishing, robo de datos, correo electrónico comercial comprometido (BEC) y ataques DDoS, especialmente importantes para los minoristas en épocas de alta demanda.
Preparación Integral: La Clave para la Ciberseguridad Continua
Para mitigar estos riesgos, las organizaciones deben adoptar un enfoque integral que incluya:
- Parches y actualizaciones automatizadas para reducir la superficie de ataque
- Pruebas de penetración para detectar vulnerabilidades antes de las vacaciones
- Autenticación multifactor (MFA) y gestión de contraseñas segura
- Cifrado de datos para proteger la información confidencial
- Procesos para mitigar el riesgo de BEC, como doble firma en transferencias
- Auditoría y cumplimiento de proveedores para asegurar la cadena de suministro
- Planes de respuesta a incidentes para actuar rápidamente ante una brecha
- Capacitación y concienciación del personal sobre amenazas y prácticas seguras
Conclusión: Ciberseguridad 24/7, 365 Días al Año
Los ciberdelincuentes no toman vacaciones, por lo que las empresas deben estar preparadas para proteger sus sistemas y datos en todo momento. Implementando medidas de seguridad sólidas y planes de contingencia, las organizaciones pueden mantener su resiliencia cibernética incluso durante los periodos festivos.