La Tercera Sala de la Corte de Apelaciones de San Miguel ha resuelto rechazar el recurso de amparo presentado por la defensa de Jorge Valdivia, el exjugador de fútbol acusado de graves delitos sexuales. Como resultado, Valdivia seguirá cumpliendo su condena de prisión preventiva en la cárcel de Rancagua, sin poder acceder al arresto domiciliario.
Cabe recordar que la discusión del amparo se originó después de que la Corte Suprema declarara admisible la acción presentada por la abogada Paula Vial, tras el revés sufrido por la defensa en el mismo tribunal de alzada el pasado 4 de diciembre. Sin embargo, esta última apelación ha sido desestimada por completo, lo que significa que Valdivia pasará la Navidad entre rejas, enfrentando los cargos que se le imputan: dos violaciones, un abuso sexual agravado y un abuso sexual.
Antecedentes del Caso
El exfutbolista Jorge Valdivia fue detenido a finales de noviembre, luego de que varias mujeres lo denunciaran por agresiones sexuales ocurridas en diferentes momentos. Tras la investigación, el exjugador fue imputado por graves delitos y se le decretó prisión preventiva como medida cautelar.
La defensa de Valdivia intentó revertir esta situación a través de un recurso de amparo, argumentando que su cliente debía ser beneficiado con el arresto domiciliario. Sin embargo, la Corte de Apelaciones de San Miguel ha ratificado la decisión inicial, manteniendo al exfutbolista recluido en la cárcel durante las próximas semanas, incluyendo las festividades navideñas.
Implicaciones y Reacciones
La resolución de la Corte de Apelaciones ha generado diversas reacciones en la opinión pública. Algunos sectores han aplaudido la firmeza de la justicia al mantener a Valdivia encarcelado, mientras que otros han cuestionado el impacto emocional que esto podría tener en el exjugador y su familia durante las fiestas.
En cualquier caso, el proceso judicial seguirá su curso, y Valdivia deberá enfrentar los cargos en su contra en los próximos meses. La sociedad chilena observa con atención este caso, que ha puesto en evidencia la necesidad de abordar con mayor rigor los delitos sexuales y garantizar la protección de las víctimas.
