En el popular reality show Palabra de Honor, los participantes tuvieron que poner a prueba sus habilidades de baile en una competencia de talentos. Uno de los momentos más destacados fue la presentación de Anaís Vilches y Malito, quienes realizaron una coreografía de reggaetón con pasos provocativos.
La situación generó cierta incomodidad entre los involucrados, ya que Anaís tiene una relación con el cantante Marcianeke. Bromeando con el coreógrafo, Anaís mencionó que su novio podría ponerse celoso, a lo que Marcianeke respondió con buen humor, asegurando a los demás participantes que solo se trataba de una competencia de baile.
Sin embargo, Malito expresó su propia incomodidad al tener que bailar con la pareja de su amigo, prefiriendo hacerlo con otra persona para evitar posibles conflictos. Algunos participantes comentaron que Anaís podía decidir por sí misma, pero ella mencionó que estaba siendo cuidadosa por respeto a su relación.
Dentro de la casa, Anaís habló con Cata Pulido sobre si Marcianeke realmente estaba molesto. Cata le comentó que el cantante había hecho un comentario sobre el vestuario de Anaís, que le parecía similar a ropa interior, pero le aconsejó no darle importancia al asunto. Anaís fue a hablar con Marcianeke, quien le dijo que su vestuario para el baile parecía lencería, aunque su tono indicaba una leve molestia.
A pesar de estos momentos de tensión, la situación no se agravó, y Anaís comentó que ella no se quejaba cuando su novio aparecía con modelos en sus videos musicales. Durante la presentación, Anaís y Malito se destacaron en la pista y ganaron la competencia contra sus contrincantes, lo que fue celebrado por Marcianeke y los demás presentes.
Después de la actuación, la pareja intercambió risas y bromas sobre los «celos guardados». Finalmente, Anaís y Malito se llevaron el premio de la competencia, dejando atrás cualquier tensión y disfrutando de su victoria juntos, mientras Marcianeke lo tomó con humor y satisfacción.
