Canciller de Chile Advierte Sobre Posible Fraude Electoral en Venezuela
En una reciente comparecencia ante la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Baja, el Canciller de Chile, Alberto van Klaveren, abordó la compleja situación electoral en Venezuela. Si bien el Gobierno chileno reconoce una alta posibilidad de fraude en el proceso, también ha descartado por ahora reconocer a Edmundo González como presidente electo.
Acompañado por el embajador chileno en Venezuela, Jaime Gazmuri, quien fue recientemente expulsado por el régimen de Nicolás Maduro, el Canciller explicó que el reconocimiento de un líder opositor le corresponde al país respectivo y no a otro país
. Además, afirmó que la mayoría de los países, incluidos Estados Unidos, la Unión Europea y algunos mediadores, se han mantenido en una postura crítica frente al proceso electoral.
Aprendiendo de la Experiencia de Juan Guaidó
El Canciller Van Klaveren también argumentó que la comunidad internacional no quiere repetir la experiencia del presidente encargado Juan Guaidó, porque no resultó ser efectiva y no resultó un cambio en Venezuela
. Esto sugiere que el Gobierno chileno ha aprendido de los errores del pasado y busca evitar una situación similar.
Negociación como Camino Hacia la Solución
Ante la interpelación del diputado Raúl Soto sobre la sostenibilidad de esta postura, el Canciller respondió que la posibilidad de negociación con países como Colombia, México y Brasil sería clave. En sus palabras, Se está intentando una negociación (…) y cualquier ejercicio de negociación implica no solamente a la oposición, sino algún tipo de trato con el Gobierno
.
Conclusión: Cautela y Búsqueda de Soluciones Negociadas
En resumen, el Gobierno de Chile, a través de su Canciller, ha adoptado una postura cautelosa frente a la situación electoral en Venezuela. Si bien reconoce la alta posibilidad de fraude, descarta por ahora reconocer a Edmundo González como presidente electo, aprendiendo de la experiencia fallida con Juan Guaidó. En su lugar, apuesta por una solución negociada que involucre a la oposición y al Gobierno venezolano, con la participación de países mediadores como Colombia, México y Brasil.
Esta postura refleja la complejidad del escenario y la necesidad de encontrar un camino que permita una transición democrática en Venezuela, sin caer en soluciones simplistas que puedan resultar ineficaces. El Gobierno chileno parece estar buscando un enfoque más pragmático y equilibrado, en busca de una salida duradera a la crisis venezolana.
