Putin advierte: Rusia está preparada para una guerra nuclear
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha asegurado este miércoles que Moscú “está preparado desde el punto de vista técnico” para una guerra nuclear y ha afirmado que las capacidades con las que cuentan las fuerzas rusas son “más modernas” que las del resto de países del mundo.
“Desde un punto de vista técnico y militar, estamos preparados, desde luego”, ha dicho durante una entrevista a la cadena de televisión Rossiya 1 y a la agencia RIA Novosti. “Las tropas están en un estado constante de preparación para el combate”, ha explicado.
“Nuestra triada nuclear -la visión del arsenal nuclear en misiles en silos en tierra, misiles transportados por bombarderos estratégicos y misiles en submarinos nucleares- es más moderna que cualquier otra. Sólo nosotros y los estadounidenses tenemos una tríada así“, ha defendido. “En términos de misiles y cabezas, tenemos aproximadamente una paridad, pero los nuestros son más modernos”, ha reiterado.
Así, ha señalado que diversos países “están desarrollando todos sus componentes, igual que Rusia”. “Eso no significa, en mi opinión, que estén preparados para una guerra nuclear mañana. ¿Quieren? Estamos preparados“, ha reseñado, tal y como ha recogido el diario ruso ‘Izvestia’.
Putin ha destacado además que Rusia no se ha planteado hasta la fecha el uso de armas nucleares en el marco de la invasión de Ucrania, desatada en febrero de 2022. “¿Para qué necesitamos usar armas de destrucción masiva? Nunca hubo esa necesidad”, ha asegurado.
En este sentido, ha advertido de que “las armas existen para ser usadas” y ha reiterado que Moscú mantiene “sus propios principios” para determinar su utilización. “Estaríamos preparados para usar esas armas (…) si hablamos de la existencia del Estado ruso, da dañar nuestra soberanía e independencia”, ha argumentado.
Putin ha afirmado además que es importante que Rusia mantenga su capacidad para defenderse ante cualquier tipo de amenaza. “Nadie nos tendrá en cuenta si no podemos defendernos. Las consecuencias serían catastróficas para el Estado ruso. Nuestros hijos no tendrían un futuro, ya que seríamos un país de tercera o cuarta fila”, ha explicado.