El caótico cambio de mando en Guatemala
Este domingo se vivió un tenso cambio de mando en Guatemala, donde el presidente de dicho país, Bernardo Arévalo de León, sufrió un polémico retraso en su investidura, que obligó a varios mandatarios a dejar el país centroamericano sin la posibilidad de poder presenciar la ceremonia.
Uno de ellos fue el presidente Gabriel Boric, quien tuvo que regresar a Chile este domingo por la tarde debido a que tenía “compromisos” el lunes por la mañana, tal como dio a conocer en sus redes sociales. “Yo he de partir de vuelta a Chile en el horario programado porque tenemos compromisos a primera hora del lunes“, explicó el jefe de Estado.
De esta forma, el mandatario comentó que se va “con la tranquilidad” de que Guatemala y Arévalo de León saben que tienen en Chile y en su Gobierno “a un aliado para la construcción democrática de una sociedad más justa“.
El retraso y los obstáculos
La ceremonia estaba programada para la tarde de este domingo, pero se atrasó en más de 10 horas, provocando que Bernardo Arévalo de León fuera investido en la madrugada de este lunes tras una jornada llena de incertidumbre.
Esto se debió a que el Congreso saliente se demoró en exceso en juramentar a los 160 diputados de la legislatura 2024-2028, requisito previo para la toma de posesión del nuevo presidente.
El presidente saliente, Alejandro Giammattei, no se hizo presente en la ceremonia y envió los símbolos institucionales a través de su secretaria. Mientras tanto, el vicepresidente, Guillermo Castillo, sí participó en la toma de posesión y entregó su cargo a Karin Herrera.
Giammattei encargó a su secretaria personal entregar la banda presidencial al Congreso. “Ante el riesgo de llegar a media noche sin iniciar los actos protocolarios, en este momento hice entrega de los símbolos de la Presidencia al Congreso de Guatemala”, expresó el presidente saliente por medio de sus canales oficiales.
El nuevo Congreso y la toma de posesión
Finalmente, la sesión de investidura comenzó en la medianoche del domingo después del retraso causado por diversos obstáculos por parte de los parlamentarios salientes. A pesar de ello, el nuevo Congreso quedó constituido y el presidente pudo asumir su cargo después de varios intentos de “golpe de Estado” denunciados por el nuevo gobernante desde que ganó las elecciones en agosto de 2023.