La historia de Ina Montt, una atleta diabética que inspira
Las Pumas hicieron historia este jueves 3 de octubre al obtener la medalla plateada en el relevo femenino del 4×100. Ina Montt, atleta de 27 años y paciente diabética, llevó al podio la bandera chilena, junto a Isidora Jiménez, Anaís Hernández y Martina Weil. Tras la consagración, la joven envió un especial mensaje a quienes padecen su misma enfermedad. Muchos se hicieron eco de su historia, cuando trascendió que competía con una bomba de insulina. Nada excepcional para ella, pues cree que “siempre nos tocan cosas difíciles en la vida”.
“En algún minuto fue mi diabetes y este año fue una lesión, creo que siempre uno puede darlo vuelta. Aprovechar esas circunstancias un poco adversas, darlo vuelta, motivarse y cambiar la historia a las cosas”, comentaba Ina Montt a DSports luego del triunfo.
Una lucha constante contra la diabetes
A la deportista le diagnosticaron diabetes cuando tenía apenas 11 años. Sin embargo, eso no le impidió entrenarse y competir en distintas categorías hasta ganarse un lugar en los Panamericanos. Y junto a sus compañeras de equipo, lograron cumplir con la meta en 44.35 segundos. Esto es 5 menos que los conseguidos en el Sudamericano de Brasil en julio de este año.
Ina Montt, convencida de que “Sí se puede”, dejó un alentador mensaje a quienes conviven con su misma enfermedad. “Quiero dedicar esta medalla de estos juegos Panamericanos para toda la gente que vive con diabetes al igual que yo. Con esto demostramos que sí se puede”, expresaba con el premio en la mano. El triunfo llegó justo en el mes en que se desarrollan campañas de concientización.
La diabetes en Chile y el camino de la superación
De acuerdo a la última Encuesta Nacional de Salud, dos millones de chilenos padecen de diabetes, con una tasa de prevalencia del 12,3 %. El mismo destaca que una de cada tres personas adultas es insulino resistente, de las cuales un 30 % podría terminar siendo diabética. La Diabetes Mellitus tipo 2 está en incremento en todo el mundo y Chile no es la excepción. Pues, el sedentarismo y los malos hábitos alimentarios se convirtieron en factores de riesgo muy temidos, ya que influyen severamente en el desarrollo de la enfermedad.
Pese a las grandes dificultades que Ina ha atravesado a lo largo de su carrera, está visto que nunca bajó los brazos. Tiempo atrás, la velocista se refirió a su salud con el medio especializado, Ladyrun, y explicó que su mayor desafío como atleta profesional fue “compatibilizar los estudios y la carrera deportiva. Además de compatibilizar la diabetes y el alto rendimiento. Con las dos cosas he ido aprendiendo con el tiempo a conocerme y a ver qué me funciona y que no”, señaló entonces.
Lo más importante es que en su discurso dejó en claro, no solo que las personas con diabetes pueden practicar un deporte y triunfar, sino que el movimiento es necesario para llevar una mejor calidad de vida. “Creo que el deporte ayuda mucho al tratamiento de la diabetes tipo 1. En mi caso, mientras más deporte hago, menos insulina necesito y más estable estoy, así que es un plus, me ayuda”, reflejó. Y por último, no olvidó comentar lo elemental que es en su vida la alimentación correcta. Ina Montt es una chica de disciplina y asegura que además del gran entrenamiento que lleva adelante se focaliza también en los alimentos que le sirven para un mejor rendimiento y cuáles para el después.