Una rivalidad que no tiene fin
Llevan años tirándose palos y la polémica no termina. Carolina de Moras y Pamela Díaz no se pueden ver ni en pintura luego de un episodio que marcó un antes y un después en su relación televisiva.
Es que, cuando ambas trabajaban en Chilevisión, la Fiera afirmó que su compañera era una mala copia de Tonka Tomicic, lo que le valió la salida del programa. Si bien, Carola desmintió tener responsabilidad alguna en la decisión de sacar a Pamela del matinal, la guerra ya estaba declarada.
Un nuevo capítulo en la polémica
Hoy, mucho tiempo después de aquel suceso, Carolina de Moras volvió a referirse al tema en el podcast Bombastic, conducido por la periodista Cecilia Gutiérrez. “Yo insisto: las personas que me critican son siempre las mismas. No tenemos ni cuartos ni terceros involucrados”, afirmó, apuntando contra Pamela Díaz y Nacho Gutiérrez, sus dos archienemigos de la farándula.
“También entiendo el malestar de la Pamela (Díaz), porque en su momento, cuando pasó un tema con la Pamela, le dije mi punto de vista, claramente no le cayó bien, y desde ahí que me hizo la cruz”, admitió.
Una visión sincera
A pesar de los encontrones mediáticos, Carolina de Moras no guarda rencor a Pamela Díaz. “La encuentro muy simpática, y le tenía buena. Trabajamos juntas en el matinal, nos aprendimos a conocer y todo, pero creo que a veces en la televisión se compite mucho con los rostros”, expresó.
“Cuando uno muestra que lo hace fácil y llevadero, la gente piensa que todos pueden hacer tu pega, y que es como ‘¡sentarme, ya, y listo, démosle!'”, criticó.
La importancia de la televisión
Carolina de Moras destacó que trabajar en televisión requiere de criterio, objetividad, neutralidad, perfeccionamiento y estudio. “La televisión no es solamente improvisar y ser una cara bonita”, señaló.
Finalmente, la animadora reconoció que es rentable en su trabajo y no le importa lo que piensen sus detractores. “Soy rentable, y me da lata decirlo porque creo que suena pretencioso de mi parte, pero creo que renta darme. Porque a mí, de verdad, y con respeto a los que lo hacen, me importa un huevo”, concluyó.